Invisibles

Salieron al mercado hace poco años y no se quedaron a tras como preferidas por mucho publico, ahora las cerraduras invisibles se instalan fácilmente y son muy versátiles.

¿Merece la pena una cerradura invisible?

Según las circunstancias si. Pero eso es algo que uno mismo debe valorar. Estas cerraduras no se aprecian desde el exterior y están ocultas a todo aquel ajeno al acceso de la vivienda. Van muy bien cuando se quiere ocultar la situación exacta de la cerradura y se quiere evitar que se puedan dañar de alguna forma. No son visibles por lo que dar con ellas y forzarlas es bastante laborioso. Directamente se van a otra puerta, la que tenga esta cerradura esta a salvo de ser manipulada.

¿Como se instala una de estas cerraduras invisibles?

Cada modelo viene con su manual de instrucciones para la adecuada instalación. Se pueden instalar en casi cualquier puerta. Solo hace falta que el perímetro donde se va a realizar la instalación quepa la cerradura invisible. Suelen instalarse en varias partes. Primero se ubica la posición donde va a ir emplazada. Luego se pega con un pegamento extra fuerte, que lleva la propia cerraja. Se le instalan los tornillos y ya solo queda que se coloque el cierre en el marco. Este primeramente se ajusta a la principal, de manera que se observe que cierra y abre a la perfección sin atascos de ninguna manera. Se señala la posición y se instala de la misma forma que la parte anterior. Con el pegamento extra duro y la tornillería después. Se hacen la pertinentes pruebas de apertura y cierre y se ajusta con los tornillos de posición que lleva incorporados. Y ya esta, ya tenemos la cerradura instalada en diez minutos.

¿Que tipo de llave tiene?

No tiene llave. La cerradura invisible no lleva boca llave. En vez de esto lleva un mando a distancia que se programa con la cerradura instalada en la puerta. Suelen venir tres mandos en cada pack. pero se pueden pedir adicionales si se necesitan.